Constantemente en el día a día nos encontramos gestionando el riesgo ya sea en nuestra vida, en nuestras inversiones y negocios. La gestión del riesgo es en virtud de la evaluación ante los riesgos presentados.
Muchos gestionamos el riesgo sin saber que lo estamos haciendo, es decir, de forma totalmente inconsciente, básicamente al realizar cualquier tarea o actividad cotidiana, por otra parte cuando hablamos de mercado financiero, la gestión del riesgo se convierte en un deber a seguir al pie de la letra sumamente consciente.
En el mercado bursátil podemos describir la gestión del riesgo como, la forma de actuar de cada empresa o entidad financiera frente a los mercados, en el mercado financiero los traders gestionan su riesgo todo el tiempo en base a las decisiones a tomar, ya que esto determinará una buena o mala inversión.
Te diremos cómo se compone básicamente el esquema de gestión del riesgo que en este caso consta de 5 pasos detallados a continuación
Establecer un objetivo, identificar el riesgo, evaluar riesgos, formular una respuesta, y monitorización
Este paso se encarga de definir cuál es nuestro objetivo principal, podremos decir también que es el paso donde se determina el riesgo a asumir en la inversión del individuo o institución financiera.
Este segundo paso es uno de los más importantes ya que aquí determinaremos los riesgos potenciales a asumir, y sobre todo poner en balanza si el mercado va en nuestra contra que tanto estamos arriesgando respecto al beneficio que podremos obtener.
Luego de haber definido e identificado los riesgos pasaremos a hacer una evaluación de los mismos. Estos riesgos son clasificados en orden de mayor a menor importancia lo que despeja muchas dudas y podremos visualizar mejor una oportunidad.
Este cuarto paso es el que nos permite definir respuestas en base al riesgo anteriormente presentado y ordenado, básicamente este paso se encarga de determinar que acción se llevará a cabo en cada caso.
Este quinto y último paso, es el que se encarga de monitorizar todo el proceso de el riesgo asumido y observa los datos proporcionados por el mercado en función.
Una estrategia de trading por más organizada e útil que sea puede no tener éxito si no gestionamos adecuadamente el riesgo, un trader o inversor puede ir ganando con su estrategia unas cinco veces pero a la sexta vez si pierde una sola, y este no gestiona su riesgo puede perder incluso todo lo que ha ganado en las posiciones anteriores.
Aquí entra en juego lo que es el riesgo/beneficio, que en otras palabras es donde sucede en muchos casos, la incorrecta gestión del riesgo, es decir arriesgan 5000 $ para ganar 300$ esto sin duda es lo peor que puedes hacer.
Un pequeño tip, tu beneficio tiene que ser por lo menos 2 veces mayor al riesgo es decir,
arriesgas 5000$ para ganar 10.000$, de allí hacia arriba pero no más de 3 a 1.
Una de las herramientas más sólidas para la correcta gestión del riesgo, son los stop loss y take profit, básicamente son el límite de pérdida (stop loss) y la toma de beneficios (take profit). Utilizando correctamente estas dos herramientas tu operativa estará controlada de riesgos constantemente, están monitoreando el mercado o no.
Ahora veremos ciertos riesgos que se presentan en nuestra operativa en el día a día:
Este riesgo es minimizado en su totalidad cuando establecemos órdenes de stop loss en cada operación, para que nuestras operaciones se cierren automáticamente cuando alcancemos la pérdida máxima establecida.
Este tipo de riesgo se puede minimizar operando únicamente en mercados lo suficientemente capitalizados, que estos tienden a ser mucho más líquidos que el resto evitando así un desplome sin previo aviso.
Este riesgo se minimiza muy fácil operando e invirtiendo en distintos tipos de activos, lo que se conoce como diversificación de cartera, el cual nos permitirá no poner todo nuestro capital en un solo activo, sino que diversificar por si uno cae, aún tenemos varios mercados activos y seguros.
Antes de invertir en el mercado financiero, se recomienda que detalles todo en un cuaderno de apuntes, paso a paso analices el riesgo y si evalues los distintos panoramas que se te pueden presentar, y cuales serían los riesgos en base a los beneficios que podremos obtener. Es muy importante que no te saltes ningún paso ya que tu determinación de evaluación, dictarán si eres rentable o no.
Visualiza y estate alerta, contempla todos los puntos, sobre todo no te dejes llevar por las emociones.